Rituales de pandemia que hemos adquirido después de un año

Hace tan solo dos semanas se cumplía ya un año, desde que oficialmente se declarase la pandemia en nuestro país. Han cambiado horarios, rutinas, costumbres y nuestro día a día en general. Por eso hoy, haremos una recopilación de los rituales de pandemia que hemos ido adquiriendo después de un año.

Rituales de pandemia que nos han cambiado

Las rutinas personales son las que marcan nuestra vida y el avance de esta. Estructuran nuestro día a día y que se modifiquen es causa de agobio para muchos. Por esta razón las medidas impuestas como consecuencia de la situación sanitaria que vivimos actualmente, han sido el motivo principal de que hayamos adquirido rituales nuevos.

Según el estudio realizado por Dimitri Schmitow, psicólogo y experto en economía de la conducta, ha explicado los motivos por lo que que tras un año de pandemia, somos los mismos, pero no los de siempre.

En concreto, el grupo de población general que abarca entre los 25 y los 34 años, son los que más han visto que sus hábitos se modificaban como consecuencia de la pandemia. Además, si queremos ser más concretos, se han visto alterados en lo que respecta a la rutina matutina.

La ducha se sigue llevando a cabo sin modificaciones, sin embargo la hora de levantarse se ha visto atrasada en una media de 45 minutos a una hora y media con respecto a tiempo antes de la pandemia. Tanto si es como para teletrabajar o para estudiar y asistir a clases virtuales.

El chándal, nuestro aliado durante y después de la pandemia

No obstante existe una premisa que afecta a la población general, sin tener en cuenta el rango de edad en la que cada uno se encuentre. Además es un dato que alcanza como respuesta unánime al 40% de los entrevistados. Hace referencia a un tema que no es otro que a la apariencia física y la vestimenta.

Los datos confirman que:

• El 18,6% se preocupa menos por el aspecto de su apariencia física en lo que refiere a la forma de vestir
• Casi un 31% reconoce que, tras el confinamiento domiciliario, la importancia que le daba a su aspecto y forma física también se ha visto afectada. Disminuyendo esta, de forma considerable.
• En la misma línea, el 27% ya no se preocupa tanto de la ropa que decide ponerse cada mañana para empezar el día. Restando importancia de esta manera a las primeras impresiones que se puedan causar.

Eloy Martínez