Las piedras preciosas ya no serán sacadas con sudor, sangre y lágrimas como era costumbre en el pasado. En un pueblo extremeño, Trujillo, una empresa norteamericana ha comenzado a construir la primera factoría europea para la fabricación de diamantes artificiales. Su nombre es Diamond Foundry y uno de los principales accionistas de este emporio es el famoso actor Leonardo Di Caprio.
Esta factoría se convertirá en la principal productora de diamantes artificiales para uso industrial como semiconductores con tecnología punta pionera en el mundo. Supone una inversión de 800 millones de dólares (alrededor de 670 millones de euros) y la creación de 300 empleos directos.
La empresa ha empezado a iniciar la construcción de la planta hace unas semanas. Este pueblo extremeño se convierte así en la mayor reserva de piedras preciosas de Europa.
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