La extinción de la humanidad cada vez más cerca

La extinción de la humanidad ha sido alertada desde Massachusetts

Son muchas las teorías que inundan las redes acerca de una posible extinción de la humanidad. Pero parece que a día de hoy, son varios los indicios que demuestran que estamos más cerca que nunca de vivir la extinción de la humanidad. Ya no es solo el hecho de que la temperatura del planeta ha aumentado a niveles impensables hace años, si no que, el nivel de carbono presente en la atmósfera se ha incrementado a tales niveles que es posible que esto acabe con la vida humana en la Tierra.

Daniel Rothman, experto del Instituto de Tecnología de Massachusetts, ha alertado durante los últimos días que la extinción de la humanidad está demasiado cerca y que evitar esta situación será demasiado complicado. Siempre se ha especulado acerca de que la próxima extinción de la humanidad ocurrirá debido a que un asteroide colisionará contra la Tierra provocando una onda expansiva que acabará con la humanidad y con el resto de seres vivos en segundos. También se ha hablado de la posibilidad de que un supervolcán entre en erupción y este provoque que sean otros los que erupcionen teniendo como consecuencia la irrupción de continuos terremotos y tsunamis que acabarían enterrando a la población.

2100, el año de la extinción de la humanidad

Pero a pesar de las múltiples teorías que hay acerca de la posibilidad de que haya «otra extinción masiva» en los años venideros, parece ser que la más probable es la expuesta por Daniel Rothman. Se estima que en 2100, la población y los seres vivos habitantes en la Tierra desparezcan de forma catastrófica debido al aumento de los niveles de carbono en la atmósfera.

El 2100 es la fecha en la que se vaticina el quinto final de los tiempos desde que se tiene registros. Cada vez que ocurre una extinción masiva, cada millones de años, se lleva por delante alrededor del 96% de especies marinas y el 70% de vertebrados terrestres. Siendo la extinción de la época del Pérmico-Triásico la más grande de la historia.

Lo que defiende Rothman y otros biólogos relevantes del planeta, es que, es necesario que el ciclo de carbono funcione de forma correcta para que el planeta no colapse. Esto quiere decir que el carbono que se produce durante la vida no debe exceder al que se recicla porque si esto ocurre, tendrá consecuencias fatales en la Tierra provocándose una especie de «efecto dominó» que acabará con la extinción de la población humana y del resto de seres vivos. Los océanos y la atmósfera tienen un límite en la cantidad de carbono que pueden soportar, si estos parámetros se rompen, la extinción masiva será un hecho y no podrá pararse de ninguna forma.

Laura Aller