La adicción de un cliente a ese determinado tipo de chucherías hizo que su familia alertara a la Guardia Civil sobre lo extraño de esas gominolas.
Agentes de la Guardia Civil han desmantelado un laboratorio ilegal dedicado a la fabricación de gominolas de marihuana con alta concentración de THC, el principio activo del cannabis, en una vivienda de Coma-ruga (Tarragona).
El familiar de un cliente alertó a la Guardia Civil de que este estaba desarrollando una adición hacia estos productos, a raíz de lo cual se inició la investigación, informa un comunicado del Ministerio del Interior y la Dirección General de la Guardia Civil este domingo. Los investigadores descubrieron que en el norte de Tarragona era donde más consumidores de este tipo de ‘chucherías’ había y fueron cerrando el círculo hasta dar con un chalet en la localidad de Comarruga-El Vendrell desde donde salían estas gominolas.
A lo largo del operativo los agentes han localizado varios de los productos y comprobado que las gominolas «dan positivo en sustancias cannábicas».
La Guardia Civil ha procedido al registro del chalet desde donde se estaban distribuyendo y ha intervenido 247 gominolas preparadas para la venta, cerca de 12 kilos y 74 plantas de marihuana, además de alcohol neutro de origen agrícola.
El supuesto autor de los hechos ha sido detenido por un presunto delito contra la salud pública y puesto a disposición del Juzgado de Instrucción nº3 de El Vendrell (Tarragona), y también su pareja está siendo investigada.
Recetas en la red
Curiosamente pueden encontrarse recetas para hacer estas chucherías en la red.
Posesión de cannabis
Tal como en Nueva York se despenalizó la posesión de menos de 56 gramos de cannabis, en España se permite poseer hasta 100 gramos de marihuana siempre que los mismos sean para consumo personal y privado. El tráfico y su producción, es totalmente ilegal.
En ocasiones, suele haber ciertas excepciones debido a personas que utilizan las propiedades terapéuticas del cannabis para tratar problemas de salud y, sobre todo, si está recetado por un médico. La ley, hasta cierto punto, puede adaptarse a la nueva era del CBD y todo lo que esto conlleva, pero siempre que se demuestre la receta o comprobante respectivo.
Posesión y consumo, sin embargo, son dos temas distintos y se suelen confundir con frecuencia, cuando ambos incluso tienen apartados distintos dentro de la ley.
Consumo de Cannabis
Si bien se puede consumir cannabis en espacios privados, tales como un hogar o clubes de cannabis, el consumo en espacios públicos es considerado una infracción grave. Por esta razón, a quien cometa esta falta se le incautará la droga y se le asignará una multa que puede ir desde 601 a 30.000 euros, de acuerdo a la magnitud de la infracción.
Hoy en día, consumir cannabis de forma legal en España es posible, por más que sigan existiendo grises en la ley que aún no estén del todo clarificados. Pero, al igual que el cultivo, es un proceso más seguro al aferrarse a lo que sí especifica la legislación para evitar problemas o confusiones que conlleven a infracciones graves.
Consumo y preocupación creciente de este producto
El Instituto Colegiado de Salud Ambiental de Reino Unido, CIEH, ha alertado sobre la creciente venta y consumo de comestibles hechos con cannabis en ese país. Estos productos se consumen, generalmente, en forma de gominolas, y se venden a través de redes sociales.
Estas golosinas suelen contener tetrahidrocannabinol, THC, derivado del cannabis. Sin embargo, el CIEH alerta sobre estos productos porque quizás la cantidad de THC supere el permitido por la Agencia de Estándares Alimenticios de Reino Unido, FSA.
De hecho, tal y como recoge Food Safety News, en 2021 fueron seis los niños menores de 10 años hospitalizados en Irlanda por consumir este tipo de productos.
Atraen claramente a los niños»
Debido a la aparente facilidad para adquirir estos productos, el CIEH ha mostrado su preocupación por la «venta descontrolada» de estas gominolas en redes sociales. «Los artículos como los dulces de cannabis son una preocupación. Si se estuvieran vendiendo en la calle [como un producto legal en un comercio], habría un requisito para declarar los ingredientes, declarar la presencia de alérgenos y el nombre del fabricante, para que los compradores y los reguladores estén informados», explica Julie Barratt, presidenta del CIEH, acerca de la dudosa procedencia y aprobación de controles sanitarios de estos dulces derivados del cannabis.
Barratt describe que desde el Instituto no saben dónde encontrar a los fabricantes de estas gominolas ni comprobar su calidad. Además, sitúa el foco en los niños que los consumen: «Los dulces de cannabis claramente atraerán a los niños, pero no sabemos cuánto cannabis hay en los dulces, cuál es su pureza y qué ‘dosis’ es segura y cuál no», argumenta.
Asimismo, Barratt advierte que comprar estos productos de dudosa procedencia supone un «riesgo real», sobre todo para las personas que los coman pensando que son caramelos convencionales.
Pero que las gominolas de cannabis se vendan por redes sociales y que se desconozca su procedencia no es el único peligro de estos productos, describe Food Security News. Este medio añade que los paquetes de estos dulces son muy similares a los de las gominolas legales, por lo que pueden confundirse.
Efectos de las gominolas
Según las autoridades británicas, las gominolas de cannabis son más fuertes que otros productos derivados de las plantas. Este efecto se produce porque el cannabis ingerido tarda más tiempo en hacer efecto que el aspirado, por lo que el riesgo de sobredosis aumenta.
Asimismo, Food Security News concluye que los efectos que puede provocar su consumo son: boca seca, náuseas, dificultad para respirar, ansiedad y alucinaciones.
Quién debe regular su producción
En Reino Unido, el organismo responsable de regular la producción de cannabidiol, CBD, en alimentos nuevos es la FSA. Sin embargo, regular este químico proveniente de la planta del cannabis no incluye el THC, que es otra sustancia derivada y controlada bajo la ley británica de Uso Indebido de Drogas.
Asimismo, es el Ministerio del Interior del Reino Unido el organismo que se encarga de tramitar las solicitudes de licencia de aquellas personas que quieran producir, suministrar, cultivar plantas de cannabis e importar o exportar drogas controladas.
Desde el CIEH, Barratt argumenta que «si hay un mercado para los dulces de cannabis y son un producto lícito no podemos objetar que se fabriquen y vendan, pero debe hacerse en un ambiente debidamente regulado y controlado y estar sujetos a las mismas salvaguardas que cualquier otro producto alimenticio».