Un pueblo valenciano celebra su fiesta con un encarnizado lanzamiento de ratas
En España son multitud las tradiciones que dotan de originalidad el territorio. Algunas curiosas, otras llamativas y también las que rayan todos los límites. Hay un pueblo en Valencia, El Puig de Santa María, que cuenta con una tradición de dudoso gusto, se lanzan ratas en la fiesta mayor.
Una celebración que muchos descalifican de «horrenda» y «asquerosa» pero que también cuenta con sus defensores. Su tradicional batalla de ratas muertas es algo tan singular como propio. Sí, han leído bien, se lanzan ratas muertas
La celebración se festeja cada año, el último domingo de enero. Es la curiosa forma de recordar a Sant Pere Nolasco. Una lluvia de ratas es la forma del pueblo para recordar y honrar al santo.
Es una tradición que se remonta desde hace 300 años, posiblemente tenga su origen en las pestes medievales, cuando las ratas eran el enemigo más feroz. En el mismo marco de la fiesta, los quintos golpean una especie de piñata de la que también suelen caer ratas muertas.
La gracia de la fiesta es coger las ratas al vuelo. Es un divertimento del que disfruta todo el pueblo, especialmente los niños.