La nicotina podría proteger frente al virus de la Covid-19, sobre todo en los casos más graves, al atenuar la reacción inmunitaria excesiva del organismo. Los especialistas franceses del principal hospital de París, La Pitié-Salpêtrière, son los que han compartido esta hipótesis.
El hospital de París, La Pitié-Salpêtrière, es uno de los mayores complejos médicos y de investigación en Europa.
Las simples observaciones en las últimas semanas ya llamaron la atención de los médicos parisinos. Causó extrañeza que hubiera pocos casos de Covid-19 graves entre la población carcelaria y entre los pacientes de hospitales psiquiátricos, colectivos con alto índice de tabaquismo.
Para tener más datos, pusieron en marcha un estudio con 350 pacientes hospitalizados y otros 130 con síntomas más leves de la Covid-19. Se verificó si los enfermos fumaban o no, y se les comparó con los mismos grupos de edad y sexo de la población general. La conclusión fue clara: los que fumaban tenían síntomas más leves o eran asintomáticos.
Comienzo del estudio con la nicotina
Un científico sugirió que la nicotina podría impedir al virus fijarse en las células, evitando que la infección se propague. Esta hipótesis parece confirmarse por el estudio y también tras constatarse que algunos pacientes fumadores hospitalizados por la Covid-19, al ser obligados a dejar bruscamente el tabaco, se habrían agravado.
La noticia sobre la nicotina ha abierto esta mañana los informativos de France Inter y de otras emisoras de radio públicas francesas. Otros medios ya hablaron del asunto en días anteriores, citando estudios chinos.
Sin embargo, los médicos saben que se impone la prudencia porque asegurar ahora que la nicotina puede ser benéfica rompe una tendencia de años de lucha contra el tabaquismo por los probados efectos nocivos contra la salud. No se trata de incitar a la gente a fumar, pero tampoco pueden ocultar el descubrimiento.
A punto de dar luz verde a esta teoría sobre el Covid 19
El ministerio de Sanidad francés está dispuesto a dar luz verde a un estudio clínico en el que se colocarían parches de nicotina a tres grupos diferentes, con dosis también distintas. En primer lugar, al personal médico, para ver si les protege; después a pacientes hospitalizados, para comprobar si los síntomas disminuyen. Por último, a los pacientes graves que están en cuidados intensivos, para verificar si la inflamación de sus pulmones se atenúa.
Los médicos creen que la presencia de nicotina podría hacer disminuir la respuesta inmunitaria excesiva que caracteriza los casos más graves de la Covid-19 y que puede llevarles a la muerte.