El padre de la niña padece demencia y sufre ansiedad desde que se vio obligado a ingresar en una residencia y ser separado de su hija, que padece síndrome de Down y a la que ha cuidado toda su vida. Pero, solo un corazón pegado en la ventana le calma porque sabe que su niña está ahí, cerca de él.
Cuando Luis empezó a sufrir demencia, ambos fueron ingresados en la misma residencia, pero sus habitaciones están en edificios distintos. Por este motivo, su hija va a visitarle, pero cada vez que ella se tenía que ir el hombre pensaba que le quitaban a su pequeña y sufría ataques de ansiedad y un dolor inmenso.
El corazón le permite encontrar la habitación de su hija
Sin embargo, todo cambión con el mensaje que le dejaron en su habitación y que le recuerda que su hija está justo enfrente. Y es que desde la ventana de su habitación puede ver Fani, pero al haber tantas ventanas, nunca la encontraba. Entonces el personal de la residencia colocó un corazón pegado en el cristal de la habitación de la niña.
Ahora Luis vive mucho más tranquilo, su ansiedad bajó por completo, ya que, con solo un vistazo puede ver la habitación de su hija y saludarla desde su ventana, sabiendo en todo momento que la tiene muy cerca y a diario se lanzan mensajes de cariño.