Cuantas veces hemos visto a nuestras abuelas, tías o conocidas «charlar al fresco» junto a sus amigas del pueblo. Son momentos de reunirse y compartir anécdotas con los demás. Lo curioso es que las «charlas» de los vecinos de un pueblo del sur de España podrían convertirse en Patrimonio de la Humanidad.
Algar y sus «charlas al fresco» podrían tener reconocimiento internacional
Algar es un pequeño pueblo de la provincia de Cádiz cuya población es de 1.400 habitantes. Para impulsar el turismo en la zona y sobre todo mantener sus costumbres, el Ayuntamiento ha decidido lanzar una campaña, la cual ha llegado a tener una gran repercusión. El objetivo del equipo de Gobierno es proteger las «charlas al fresco» de sus vecinos y convertirlas en Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
El evento de los vecinos de Algar para no perder su tradición
El pueblo busca proteger y dar visibilidad a sus «charlas al fresco», una tradición que perdura entre los vecinos durante las noches de verano. Para ello, el pasado 28 de julio el Ayuntamiento se encargó de promover un evento a través de la red social Facebook con el hashtag #RecuperandoCostumbres. Entonces los habitantes decidieron colaborar y el acontecimiento se convirtió en todo un éxito.
Además, grabaron un vídeo que se publicó el 2 de agosto en el Facebook del Ayuntamiento y en el que se puede ver a los vecinos participando en la iniciativa al ritmo de la canción de Camilo No es vida de rico. Al final del mismo aparece el alcalde de Algar, José Carlos Sánchez Barea (PP) dirigiéndose a cámara para hacer el siguiente llamamiento: que las redes sociales no acaben con una tradición como la de hablar con tus vecinos a la puerta de tu casa.
¿Qué es Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad?
Según la UNESCO, el Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad hace referencia a las expresiones vivas y prácticas heredadas de nuestros antepasados y que han sido trasmitidas a nuestros descendientes. Incluyen tradiciones orales, rituales, actos festivos y artes escénicas entre otros, reconocidos como propios por parte de distintas comunidades.
En el caso de Algar, de momento el Ayuntamiento ha enviado una solicitud a la Junta de Andalucía para que las «charlas al fresco» se conviertan en Patrimonio de la Humanidad. Se desconoce si recibirán respuesta, pero los vecinos se encuentran positivos. Y tú, ¿crees que las «charlas al fresco» de tu pueblo también deberían considerarse Patrimonio?
Virginia González