Síndrome OAB, la afección urológica que padecen algunos vacunados contra el Covid-19.
El número de efectos secundarios asociados a las vacunas de AstraZeneca, Moderna y Pfizer contra el Covid-19 aumentan según avanzan los estudios entre la población que ha recibido alguna de ellas.
Desde que comenzasen a administrarse las vacunas contra el covid, logrando el efecto de inmunidad de grupo que se ha acabado consiguiendo, con ello, que volvamos a la normalidad poco a poco, no han dejado de conocerse diferentes efectos de la misma. Hasta el momento son varios los síntomas leves (o algunos más graves) que se han achacado a la administración de la vacuna contra la covid, aunque la mayor parte de los pacientes no han experimentado cambios notables.
El último en incorporarse a la lista es el síndrome de la OAB (por sus siglas en inglés), una afección urológica que provoca la urgencia repentina de orinar, señala un estudio publicado en la “Journal of Clinical Medicine”.
La investigación, realizada por la Universidad Médica de Kaohsiung, en Taiwán, contó con 889 participantes, de los cuales 586 recibieron vacunas de AstraZeneca; 260 de Pfizer-BioNTech, y 89 de Moderna. El 13.4 por ciento de los participantes sufrieron deterioro de los síntomas de tracto urinario inferior (STUI) después de recibir las vacunas.
El estudio publicado por la ‘Journal of Clinical Medicine’, ha relacionado un nuevo efecto secundario con la vacunación contra el Covid. Se trata de la vejiga hiperactiva, también conocida como OAB. Las personas con este transtorno urológico experimentan una urgencia repentina de orinar, incluso pueden llegar a sufrir pérdidas.
Esta urgencia puede darse tanto por el día como por la noche, afectando también al sueño. Por ello, en ocasiones acarrea otros problemas como ansiedad, alteración del sueño o depresión derivados de la imposibilidad de llevar una vida normal.
Los investigadores apuntan como posible explicación a la aparición de esta afección urinaria o su empeoramiento a la propia respuesta inmune generada por la vacuna. «La vacunación puede activar una respuesta de citoquinas o una respuesta inflamatoria inducida por un receptor tipo Toll, lo que lleva a la infiltración de células presentadoras de antígenos, como macrófagos o células dendríticas, y da como resultado respuestas inflamatorias sistémicas y localizadas…, y provocar alteraciones intramoleculares que eventualmente pueden disminuir el umbral de contractilidad del detrusor y causar almacenamiento», explica el informe final.
No obstante, este efecto secundario se situaría entre los menos habituales. Los más comunes tras las vacunación contra el Covid siguen siendo dolor en el lugar del pinchazo, dolor de cabeza, malestar, fatiga, escalofríos, fiebre, linfadenopatía (inflamación de los ganglios), artralgia (dolor articular) o dolor axilar, entre otros.