El miedo a un confinamiento en China por un nuevo brote de Covid aterra. En este país asiático las normas estrictas ante la enfermedad han provocado escenas irrealistas. La última tuvo lugar el pasado fin de semana en una tienda Ikea de Shanghái. Las imágenes se han viralizado. Todo por un positivo.
La firme y férrea estrategia china para detener la enfermedad consiste en cuarentena de personas con positivo, confinamientos localizados o pruebas PCR generalizadas y obligatorias.
La pasada primavera, Shanghai (capital económica del país) estuvo confinada durante dos meses por el que fue el peor brote epidémico del país durante toda la pandemia.
Este sábado por un solo caso de contacto brotó el pánico en Ikea Shanghai. Gente corriendo sin control, familias enteras bloqueadas… la pesadilla del Covid continúa, especialmente en el gigante asiático.