Las adicciones de Chandler fuera de la pantalla
Nuestro eterno amigo Chandler ha cerrado el telón. Antes de lo esperado. Con 54 años, antes de lo que debería. Chandler Bing se ha despedido este fin de semana de manera inesperada y el mundo llora a uno de los Friends que emocionó al mundo durante 10 temporadas.
Matthew Perry sufrió un ataque al corazón en su jacuzzi de Los Ángeles después de haber hecho deporte por la mañana. Su asistente llegó a casa después de hacer unos recados y se encontró al actor sin vida. Los servicios de emergencia no pudieron hacer nada por su vida.
Perry publicó su autobiografía hace un año, titulada ‘Amigos, amantes y aquello tan terrible’, contando su largo historial de adicciones a pastillas, drogas y alcohol. El libro comenzaba con el actor presentándose de una manera cruda y honesta: “Hola, me llamo Matthew, aunque puede que me conozcas por otro nombre. Mis amigos me llaman Matty. Y debería estar muerto”. En éste cuenta como mientras en su vida como actor jugaba el papel cómico con su ironía y sarcasmo, en la vida real luchaba contra las adicciones. Él mismo revelaba como llegó a tomar 55 pastillas de Vicodin, un analgésico derivado del opio, lo que hizo que durante la tercera y sexta temporada de Friends estuviera «un poco ido».
Su familia, amigos y fans de todos el mundo lloran la pérdida de este gran actor que deja un gran legado de humor y sarcasmo para todos.