Leonor y la estricta dieta sin bocadillo de Letizia
La princesa Leonor ya lleva varios días en Zaragoza donde desarrolla sus estudios en la Academia Militar. A pesar de no estar bajo el mismo techo que su madre, la reina Letizia, la princesa no logra escapar al férreo control de su madre. La reina Letizia siempre ha estado muy preocupada por sus hijas y por su aspecto físico, buena muestra de lo que ella misma se aplica en su día a día.
Leonor a semejanza de su madre mantiene una dieta muy saludable en la que están exentas las grasas y los productos precocinados así como la comida rápida. Por ese motivo, hace unos días cuando la joven pudo disfrutar de una merienda en la capital maña junto a sus compañeros fue una tarde deliciosa para ella. En un bar de Zaragoza pudo compartir hamburguesas y pizzas con sus compañeros, a pesar de que había escolta protegiéndola (como siempre).
Sin embargo, ni las pizzas ni las hamburguesas forman parte de la dieta de la princesa. Unos hábitos inculcados por Letizia que vigila atentamente la salud de sus hijas y, por supuesto, su aspecto físico como su alimentación.
Entre los productos prohibidos, además de los donuts y demás bollería industrial, está el sabroso bocadillo de chorizo frito. Un manjar no apropiado para la princesa Leonor, ya que las consecuencias son incómodas para la princesa. La halitosis, el mal aliento, es un problema que la reina Letizia quiere evitar ante todo en la heredera. Por ese motivo este tipo de bocadillos, grasientos y suculentos, están prohibidos en cualquier tipo de menú de Leonor. Ni de vacaciones con su novio logra librarse de esta disciplina materna y real.