Se ha detectado una nueva campaña de correos electrónicos fraudulentos cuyo objetivo es extorsionar a los destinatarios de los mismos con un supuesto vídeo de contenido sexual. El ciberdelincuente amenaza con enviar dicho vídeo a los contactos de la víctima en 48 horas sino realiza el pago de una determinada cantidad de Bitcoins.
Recursos afectados
Cualquier usuario que haya recibido el correo electrónico con las características descritas en este aviso de seguridad.
Solución
Si has recibido un correo similar, ignóralo. Se trata de un intento de estafa y en realidad tu equipo no ha sido infectado con ningún malware. Tampoco han conseguido tus contactos, ni existe ningún vídeo.
Si has accedido al chantaje y realizado el pago de Bitcoins, recopila todas las pruebas de las que dispongas (capturas de pantalla, e-mail, mensajes, etc.) y contacta con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) para presentar una denuncia. Para ello, puedes hacer uso de algún testigo online.
Evita ser víctima de fraudes de este tipo siguiendo nuestras recomendaciones:
- No abras correos de usuarios desconocidos o que no hayas solicitado, elimínalos directamente.
- No contestes en ningún caso a estos correos, ni envíes información personal.
- Ten siempre actualizado el sistema operativo y el antivirus.
- Utiliza contraseñas distintas para servicios diferentes. Utilizar un gestor de contraseñas te facilitará esta tarea.
- En caso de duda, consulta directamente con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) o la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI).
MUY IMPORTANTE: no pagues ninguna cantidad a los extorsionadores, ni contestes al correo electrónico que te han enviado. Esto último sirve a los ciberdelincuentes para saber si la cuenta está activa y enviar nuevos fraudes en el futuro.
Detalles
En esta nueva versión del fraude, los ciberdelincuentes falsean la dirección del remitente del correo, haciendo que parezca que el correo se ha enviado desde la cuenta del destinatario y además, en el campo asunto se incluyen referencias a la cuenta de la víctima.
En el cuerpo del e-mail, para dotar de mayor credibilidad al fraude, se le indica al usuario cómo se habría infectado su equipo. Supuestamente, habría accedido previamente a páginas de contenido sexual infectándose de esta forma con un malware que se habría descargado en el dispositivo. Dicho malware habría recopilado sus contactos de las redes sociales, cuentas de correo electrónico, así como información de otros servicios online. Además, también habría sido capaz de activar la webcam del ordenador para la grabación de vídeos cuando la víctima accediera a páginas de contenido sexual, generando los supuestos vídeos que se utilizan como extorsión.