Los hechos tuvieron lugar ayer, domingo 06 de octubre en una finca de Traspinedo, en Valladolid.
El hombre, de 45 años y que responde al nombre de Raúl, se encontraba con su hijo de 15 años cortando el césped cuando tuvo lugar la explosión de su teléfono móvil.
Según indicó Raúl al ‘Norte de Castilla’, comenzó a tener mucha sensación de calor en su muslo, casi le ardía.
Cuando se dio cuenta que se trataba del teléfono móvil, el hombre trató de sacarlo del bolsillo de su pantalón. Sin embargo, se quemó la mano.
Aunque tenía a pocos metros una piscina, según indicó el hombre no le dio tiempo a llegar, se tuvo que tirar al suelo porque no soportaba el calor que desprendía su móvil.
Por suerte, su hijo de 15 años pudo sacar el teléfono móvil del bolsillo de Raúl en un momento en el que asomó. Tras el suceso, tuvo que ser atendido en el Hospital Río Hortega por quemaduras en la mano y la pierna derecha.
El informe médico, registra «lesiones eritematosas y ampollas en todos los dedos de la mano derecha», con quemaduras de primer grado, además de otras de menos gravedad «en la cara lateral del muslo derecho, con descamación de piel negruzca«.
Parece ser, que el hombre sufrió quemaduras debido a la explosión de su teléfono móvil cuando lo tenía en el bolsillo de su pantalón. El teléfono móvil es el modelo Energy de la marca Hammer, es un móvil que se compra por internet y que se califica el «todoterreno» porque es antigolpes, antihumedad y antirayaduras, entre otras características.