La Junta de Castilla y León ha decretado desde hoy una situación de luto oficial en señal de «duelo y respeto» a los fallecidos por el coronavirus.
De este modo, desde el 3 de abril todas las banderas de los edificios públicos de la Comunidad ondearán a media asta hasta que el Gobierno estime el levantamiento de este estado.
De forma paralela, el Consejo de Gobierno han decidido suspender todos los actos relacionados con la celebración del Día de la Comunidad el próximo 23 de abril.