Parece que la guerra de Ucrania e entrar en fase de posible acuerdo, pero para que no perdamos la tensión ya nos llegan noticias de que la séptima ola de Covid-19 está al caer, en esta ocasión agravada por una epidemia de gripe que afecta particularmente a los jóvenes en regiones como Castilla y León y Navarra. Diferenciar ahora entre una afección y otra empieza a ser complicado, aunque las analíticas realizadas dan positivo en influenza en el 37,5 de los casos, frente a un 9,8% hace solo una semana. Lo malo es que también están subiendo leventemente los casos de coronavirus.
China ha registrado su mayor brote desde la primera ola y ha confinado a nueve millones de habitantes de Changchun. La OMS advierte de un aumento de casos en todo el mundo y dice que es de esperar que continúen los brotes o repuntes locales. Y nos llega la información de que ha sido descubierta una variante que combina nada menos que la Ómicron con la Ómicron sigilosa, mientras Pfizer dice que ya tiene lista la cuarta dosis. Pensábamos algunos que la pandemia había acabado, pero parece que no. Aún queda coronavirus para rato.