«Estabilizado, pero no controlado». El incendio de la Sierra de la Culebra (Zamora) ha arrasado más de 30.000 hectáreas. El incendio, originado por un rayo de una tormenta seca el pasado miércoles, está destrozando un enclave natural y poniendo en jaque a decenas de poblaciones.
Hasta Benavente y otras localidades próximas han sido desalojados los vecinos de varios poblaciones que, poco a poco, han podido regresar a sus domicilios. También se han reestablecido las conexiones por carretera que se habían visto afectadas.
La indignación entre los vecinos de la comarca es mayúscula. Tanto que ayer el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, fue recibido entre insultos al llegar a Villanueva de Valrojo para comprobar los daños del incendio. Los vecinos protestan por la «inanición» de la Junta por mantener el nivel 2 en lugar de subirlo al máximo (3).
Por otro lado, en redes sociales ha nacido un movimiento social para reclamar ayuda para la Sierra de la Culebra. Bajo el hashtag #zamoratambienexiste piden la misma ayuda y atención que se tuvo, en su momento con los afectados por el Volcán de la Palma. En una imagen comparativa indican que en La Palma fueron 3.100 hectáreas las afectadas, mientras que en La Culebra son 25.000 hectáreas (ahora ya son 30.000 hectáreas).
