La Audiencia Provincial de Valladolid condena a un hombre por un delito continuado de agresión sexual a su hija incapacitada.
Según indica la sentencia, la víctima de 36 años padece un retraso cognitivo en el que su edad mental equivale a la de una persona entre 6 y 9 años, por lo que fue judicialmente incapacitada en 2003.
Aunque estaba interna en un centro, pasaba las vacaciones y fines de semana con sus progenitores en Valladolid. Sin embargo, el padre, aprovechando cuando estaba solo con su hija, en varias ocasiones llevó a su hija al dormitorio llevando a cabo tocamientos y otros actos sexuales a pesar de oponerse la víctima. Además en alguna ocasión como en las navidades de 2016, la pegó con un cinturón para que realizase los actos solicitados.
Según indica la sentencia, la sala considera constatados los hechos, entre otras razones por la declaración de la víctima cuya manifestación es creíble. También se tiene en cuenta la vulnerabilidad de la hija, la víctima, quien presenta una desventaja frente a su padre, el agresor.
Por todo ello, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León estableció en la sentencia de la Audiencia Provincial de Valladolid catorce años y tres meses de prisión al hombre que abusó sexualmente a su hija con retraso cognitivo; así como cinco años de libertad vigilada y 20 años de alejamiento de su hija.