La llegada del Black Friday se considera como una época en la que las tiendas pueden aumentar sus ventas con grandes descuentos, sin embargo los pequeños márgenes y la situación económica provoca que este modelo ahoga al pequeño comercio de Castilla y León, así se indica desde Conferco.
Adolfo Sainz, presidente de la Confederación de Comercio de Castilla y León, advierte de que el Black Friday ahoga al pequeño comercio y que «sólo beneficia» a las grandes empresas, en lo que consideran un modelo americano «impuesto» a las tiendas más pequeñas.
El pequeño comercio descontento con el Black Friday
En este sentido, consideran que es un mal momento para llevar a cabo grandes descuentos porque ni los clientes ni los pequeños empresarios no tienen dinero, además de que asumen «una serie de costes que van a más» como la luz, materias primas e impuestos, en un momento en el que «se vende muy poco» debido a la incertidumbre y la subida del precio de la cesta de la compra.
Es por ello que el sector tiene la esperanza de que las ventas lleguen en el periodo navideño, ya que, supone muchas veces una gran parte de la facturación anual en lo que consideran como «una montaña rusa» en el sector que se ha visto afectado por la situación económica yendo «de crisis en crisis».
De esta forma, el Black Friday ahoga al pequeño comercio porque «el margen es pequeño» y no pueden «competir contra las grandes superficies». Además, indica que deberían de estar subiendo los precios en consonancia con las circunstancias actuales, pero no pueden porque venderían aún menos.
Sainz asegura que el pequeño comercio está «atravesando una situación muy dura» y espera que la Navidad aumente las ventas para poder coger un poco de aire.