Un madre y su hija fueron cazadas violando el confinamiento para hacer un picnic en plena reserva natural.
Ha pasado más de un mes desde que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, decretara el estado de alarma en España por culpa de la crisis del coronavirus. Aunque todos los periódicos, televisiones y radios hablen de los efectos de esta pandemia aún hay gente que dice no haberse enterado de lo que sucede. Esa fue la excusa que una mujer y su hija pusieron a la Guardia Civil en Navarra.
Madre e hija fueron sorprendidas por una patrulla del Seprona mientras estaban tranquilamente comiendo en la reserva natural del río Ebro, en Tudela. Cuando los agentes les pidieron la identificación para redactar la correspondiente denuncia alegaron desconocer el estado de alarma.
“Somos muy espirituales y no vemos la televisión”, llegaron a decir. La excusa del desconocimiento, tan utilizada los primeros días, ya no tiene cabida después de tanto tiempo de confinamiento. Las calles semivacías o ver a la gente con mascarillas también hubieran servido a estas dos mujeres para saber que algo extraño ocurría estas semanas.