Directa, honesta y sincera fue catalogada la respuesta de una autónoma al señor Garzón después de un tuit publicado.
El tuit de Eduardo Garzón
Tras el tuit de Eduardo Garzón Espinosa, licenciado en Economía y en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad de Málaga, y hermano del líder de IU, Alberto Garzón, una autónoma expone con claridad su punto de vista al respecto del comentario y sin dejar a nadie indiferente.
«Piénsalo: los empleadores contratan trabajadores porque gracias a ellos obtienen beneficios, ¡y ningún empleador contrata a una persona para sólo obtener 80 euros mensuales de beneficio! Lo hacen para obtener mucho más. Así que se lo pueden permitir claramente.»
La respuesta de la autónoma a Garzón
Mariluz del Campo, una joven y autónoma, lanza mediante Facebook, una respuesta noble y directa al señor Garzón que causa un revuelo en las redes.
En la respuesta, la mujer relata sus aspiraciones, lo que tiene que soportar y lo que significa su trabajo y su empresa para ella.
«Al Gobierno,
Entre los empleadores, igual que entre los empleados, hay capaces e incapaces. No existe el bando en el que están todos los buenos y el que cuenta con todos los malos. Tampoco los abusos son solo de unos hacia otros ni más graves siempre en una dirección que en otra. Finalmente, aunque les cueste creerlo los empleadores no tienen siempre unas cuentas más boyantes que sus empleados. Por eso es deshonesto convertir a los autónomos y empresarios en una especie de explotadores poderosos que con sus injustificadas protestas intentan hundir a un gobierno que ahora es vulnerable porque solo está centrado en su entrega al pueblo. Es el gobierno quien tiene el poder y yo, como muchas otras personas, estamos sufriendo sus abusos de poder.
¿Acusada de explotadora por ser empresaria?
Sí, al menos hasta hace unas semanas, yo aspiraba, si con mi esfuerzo y capacidad era capaz de lograrlo, a vivir con la holgura y empoderamiento personal que lucen los camaradas Pedro, Pablo o Irene. Pero olvidaba que, según demuestran con sus actos, ustedes encuentran un obstáculo insalvable en mi objetivo y es que yo, por ser empresaria, soy una explotadora que no lo merece mientras que los camaradas sí pues ellos son los salvadores de aquellos a los que yo y gente como yo oprimimos.
¡Qué mejor momento que este para demostrar al pueblo como se hace justicia!
Lo que algunos autónomos debemos soportar. Un ejemplo de poder
Un ejemplo del poder. Cuando hace unos años una fisioterapeuta de mi equipo se quedó embarazada, nos reunimos y le planteé la posibilidad de atender las llamadas de los pacientes en vez de acogerse a la baja. Lo que me dijo, muy indignada, fue “yo no he estudiado tres años para hacer de telefonista”. Esta persona, sin duda tenía muy claro su proyecto. Y la empresa en la que diariamente era explotada no iba a ser quien le impidiera ejecutarlo. Resulta que yo también estudié, una ingeniería en mi caso, pero como yo soy la explotadora yo sí atiendo llamadas, también hago recados, y friego el suelo o el servicio, gestiono, llevo la contabilidad, asumo todo el riesgo y en los meses malos pierdo dinero. ..No soy millonaria. Ni mis empleados pobres. Pero nuestra relación está siempre bajo la sombra del enfrentamiento que ustedes constantemente alimentan para el crecimiento del otro actor, el estado.
El Estado, gestionado en estos tiempos por ustedes demuestra con hechos su visión, que queda resumida en un tuit por el hermano del ministro Garzón:
-«Piénsalo: los empleadores contratan trabajadores porque gracias a ellos obtienen beneficios y ningún empleador contrata a una persona solo para obtener solo 80€ mensuales de beneficio! Lo hacen para obtener mucho más. Así que se lo pueden permitir claramente.»
Mi empresa es mi vida señor Garzón
Mi empresa, tan pequeña como mis capacidades, es mi vida, señor Garzón. Por eso su comentario, en el que me retrata como a una simple explotadora que nada en la abundancia no es solo doloroso y falso. Es un aviso a navegantes. Se que nos espera un futuro muy negro cuando compruebo que el Gobierno actual comparte su miope visión de mi y de otros como yo.
Todas las empresas somos árboles que podemos dar fruto. Pero ustedes sólo ven en nosotros leña. Ahora estamos ardiendo para el Estado pero, Qué pasará después?
Nos han enfrentado
Llevan toda su vida enfrentando con eficacia a muchos empleados que sólo nos ven como el poderoso opresor y a ustedes como a los infatigables libertadores. Por desgracia este engaño tendrá fin. Digo por desgracia porque cuando las consecuencias de sus decisiones nos dejen un paisaje arrasado por el fuego, y aunque incluso la mayoría no puedan explicarse que ocurrió, todos padeceremos las consecuencias.»
Mariluz del Campo
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