La joven abortó durante el octavo mes de embarazo, según ha publicado The Guardian. Algo totalmente prohibido en Indonesia. En el país esta práctica es ilegal excepto si la vida de la mujer está en peligro o en determinadas circunstancias, como que la mujer haya sido violada, pero solo en las primeras seis semanas de gestación.
El joven violó a su hermana en ocho ocasiones desde el pasado septiembre, según declaró a la Policía. Además, reconoció que la golpeaba si ella se resistía. Ante los agentes también llegó a afirmar que ver porno le había llevado a actuar así.
Condenan a su hermano a dos años de cárcel por los hechos. Mientras que la joven a seis meses. Por ello, un colectivo de activistas indonesios en favor de los derechos de la mujer y la protección de la infancia ha presentado una reclamación formal. Desde la asociación, han calificado la decisión de encarcelar a la adolescente como “gravemente injusta”.
En una reunión celebrada el pasado lunes 29 de julio en Yakarta con miembros de la Comisión Judicial que investigó el caso, reclamaron la puesta en libertad de la joven. “Nuestra principal preocupación es que la joven no debería estar detenida. Su aborto no tendría que contarse como un delito. No debe ser criminalizada”, declara la portavoz de la asociación indonesia de planificación familiar, Ferena Debineva.