Como en casa, en ningún sitio. Eso al menos es lo que ha debido de pensar Fernando Alonso, que a las pocas de anunciar que deja la Fórmula 1 ha decidido pasar unos días en Asturias.
La noticia era esperada pero ha tenido un gran repercusión en todo el mundo, motivo por el que piloto ovetense ha preferido rodearse de los suyos para capear el temporal.
Y lo ha hecho de una forma poco habitual en él.
Siempre celoso de su intimidad, en raras ocasiones -más allá de las que obligan los compromisos oficiales- ha dado pistas sobre el lugar en el que se encuentra. Ayer hizo una excepción y colgó en sus redes sociales una fotografía tomada desde un avión acompañada del texto “Paraíso Natural”. Alonso vuelve a sus orígenes para comenzar su nueva vida.