Un total de 666 cerdos de barro han aparecido dispersos por las calles y ventanas de Toledo, causando desconcierto en algunos grupos de vecinos y alarma en las redes sociales.
Los cerdos, de pequeño tamaño, han «nacido» en puntos clave de la ciudad, como la Puerta del Sol, Santa María la Blanca o la calle Real, pero, sobre todo, han sido vistos en ventanas de viviendas, sorprendiendo a los particulares al salir de su casa. Todos llevan un número correspondiente dentro de la serie de 666 cerdos y, además, están pintados de forma diferente.
«Esta mañana nos hemos despertado, en el barrio, con estos cerditos en puertas y ventanas… están numerados: 58/666, 67/666, etc … ¿serán una indirecta o productos artesanales de rituales diabólicos por lo del 666?», ha comentado en Facebook una vecina de la ciudad. Los vecinos de Toledo se preguntan quién es el responsable de colocar estos pequeños animales de barro, y han expuesto sus opiniones por redes sociales para poner en común el misterio que despiertan. Ni siquiera en el Ayuntamiento de Toledo han sido capaces de desvelar el misterio y, según dijeron a ABC fuentes municipales, se han mostrado igual de sorprendidos que los toledanos del Casco.
El número de la bestia
Uno de los asuntos que más desconcierta a la población toledana es el número total de cerdos, 666. Para la Iglesia, el triple 6 representa el mal absoluto, y corresponde con el famoso «número de la bestia». Sin embargo, para la ciencia, este número repetido tres veces es señal de que los ángeles advierten a los terrestres para que se deje de pensar en lo material y centrarse en ayudar a los demás y estar con los seres queridos, es decir, enriquecer el espíritu.