Diego Armando Maradona dio la nota en el palco del en el Saint Petersburg Stadium durante el Nigeria-Argentina, llegando a necesitar asistencia para abandonar el estadio.
La tarde-noche de ‘El Pelusa’ empezó con un curioso baile con una aficionada nigeriana y prosiguió su particular y vergonzoso espectáculo con gestos de ánimo y apoyo a los jugadores de la albiceleste subidos de tono y poco apropiados.
Tras sus primeras actuaciones bochornosas, llegó el gol de Leo Messi, y su grado de éxtasis pasó a otro nivel. Maradona perdió los papeles completamente, comenzó a dar gracias Dios a gritos y dedicó múltiples peinetas a aficionados rivales.
La euforia se adueñó de Maradona y tras el pitido final necesitó de la ayuda de sus acompañantes para subir las escaleras del palco, evidenciando estar totalmente desbordado.
Fuentes informaban que el exjugador sufrió una «subida de tensión» debido a los «medicamentos» que se tomó en el descanso por un fuerte dolor en la nuca, aunque otros medios explican que el argentido se encontraba en un estado de embriaguez muy elevado.
Pese a los rumores que le situaban en un hospital, el entorno del exjugador aseguró que fue trasladado a su hotel.