Un vecino que paseaba a su perro sobre las siete de la mañana vio lo que le pareció un cadáver tirado en el suelo a la altura del número 38 de la calle José Fernandín, en el centro de Piedras Blancas. Se acercó varios metros y confirmó sus sospechas. Junto al cuerpo, había un charco de sangre, sobre todo, a la altura de la cabeza, tal y como informa La Nueva España.
Por la mañana eran varios los vecinos que comentaban lo ocurrido aunque en este caso no se levantó expectación por la hora a la que tuvo lugar. La Policía Local de Castrillón fue la primera en llegar al lugar de los hechos, donde el hombre se encontraba tirado en el suelo. Intervinieron en un primer momento antes de dejar el caso en manos de la Guardia Civil, encargada ahora de la investigación del accidente.
El cadáver fue trasladado ayer por la mañana al Instituto de Medicina Legal de Oviedo, donde se le practicó la autopsia. La autopsia dictaminaba que Pérez Pravia falleció por traumatismo craneoencefálico con fractura en la base del cráneo como consecuencia de la supuesta caída.
La escena del accidente tiene un desnivel pronunciado que se salva por unas escaleras. Los investigadores sostienen que el hombre se asomó al desnivel a través de una barandilla y no pudo recobrar el equilibrio.
El fallecido deja mujer, un hijo y una hija; padres, padres políticos y tres hermanos.