Carlos Sobera adquirió y se arriesgó a comprar el teatro Reina Victoria de Madrid, en el que actualmente se representa hasta junio la obra Cyrano de Bergerac.
Sin embargo, según informa El Español ahora han tenido que deshacerse de él, saliendo a la luz que está pasando por una situación un tanto peliaguda.
Y es que por lo visto la situación financiera de la empresa no es la más ideal: los ingresos estarían bajando peligrosamente mientras que los gastos les comen, y la sociedad se encontraría en números rojos.
Sobera la creó en 2003, añadiéndose la mujer debe años después. Las cuentas iban gracias a producir sus propias obras de teatro, pero en 2016 todo se empezó a torcer y las pérdidas habrían sido considerables.
En Corazón TVE han dicho algunas fuentes que el problema ha sido de Sobera:
“Se ha arrugado completamente. No ha sabido mantener una finca vieja con un mantenimiento muy caro y con una producción escasa. Aunque el teatro está mal, necesita más inversión y cuando lo compró lo hizo con una hipoteca muy alta.”