Los inconvenientes y primeros problemas en unas obras muy céntricas
Casi como un escenario de guerra están algunas calles principales de León. Aunque poco a poco, las nuevas calles van tomando forma, los cascotes y la maquinaria de obra son el pan de cada día. Estos días las principales víctimas sin duda son los negocios que tienen sus establecimientos en la ‘zona cero’ de las obras y que son los primeros en notar las consecuencias. Pero hay otros ‘heridos’ debido a traspiés y caídas accidentales.
La circulación rodada en estas calles está totalmente cortada porque evidentemente con todo el pavimento levantado se hace imposible el tránsito de los vehículos pero el paso peatonal se mantiene. Por este motivo, alguna imprudencia y otro traspiés que otro ya ha provocado más de un susto en este ‘triángulo de las Bermudas’ en el que se ha convertido la confluencia de las calles Alfonso V y San Agustín.
Hace unos días una mujer de edad avanzada tropezó con el consecuente susto. Afortunadamente no hubo que lamentar mayores males, pero no es el único caso. Alguna que otra persona ha tropezado y a punto ha estado de llevarse un buen susto. Muchas veces por la imprudencia propia de los propios peatones por intentar pasar por una zona «no debida».
Son los daños «colaterales» de estas obras que están destinadas a transformar el centro de León en más amable para los peatones, pero de momento… es zona de alto peligro para el tránsito peatonal especialmente para aquellas personas con ciertas limitaciones.