El hombre mató a su mujer y lo ocultó diciendo que tenía COVID
En un intrigante caso que mezcla crimen y la pandemia de COVID-19, David Anthony fue condenado a 38 años de prisión por el asesinato de su esposa, Gretchen, y su intento de ocultar el crimen aprovechando la situación de la pandemia. La historia comienza con Gretchen solicitando el divorcio de su esposo, David, semanas antes de su desaparición.
Gretchen, una exitosa mujer que buscaba rehacer su vida tras su divorcio anterior, conoció a David, un entrenador de gimnasio, y se casaron en 2015. Sin embargo, lo que parecía un matrimonio feliz se volvió violento y abusivo en los últimos tres años. Gretchen finalmente se separó de David en febrero de 2020 y solicitó el divorcio.
La trama se complica cuando, durante la pandemia de COVID-19, Gretchen envía mensajes extraños a su exmarido y amigos, sugiriendo que está enferma y en un centro médico. Sus amigos notaron que la forma en que escribía no coincidía con su estilo habitual, lo que generó preocupación.
Dawn, una amiga cercana, intentó contactar a Gretchen sin éxito, y la preocupación creció. Nadie podía encontrar a Gretchen, a pesar de que su teléfono móvil continuaba activo y en movimiento. La situación se volvió aún más desconcertante en medio de la cuarentena.
Finalmente, el 31 de marzo, David Anthony fue arrestado en Nuevo México mientras paseaba a su perro. Aunque inicialmente negó su participación en la desaparición de Gretchen, las pruebas de la policía lo incriminaron. Fue condenado por el asesinato de su esposa.