En los últimos días muchos leoneses observan cómo se están instalando diferentes dispositivos en calles y plazas de León. La duda está lanzada al aire, ¿serán radares? ¿control ciudadano? ¿estadísticas de movimiento de vehículos? Pero nada más lejos de la realidad. Todo apunta a que son las cámaras en las calles fijas para medir el tráfico de la Zona de Bajas Emisiones de León. Aunque el tiempo dirá, quizá sea un futuro Gran Hermano a la leonesa.
Los nuevos tiempos marcan el ritmo de las ciudades que buscan un desarrollo más sostenible y amable con el medio ambiente. De ahí la función de estos dispositivos que no están destinados a multar. ¡Eso que quede claro! Porque seguro que más de uno ya se lo temía.
Las nuevas cámaras en León
Hace unos días comenzó la instalación de estas cámaras en la ciudad cuyo fin es obtener información relevante para establecer las condiciones de la futura Zona de Bajas Emisiones, en caso de que entre en vigor en algún momento. Las cámaras fijas se ubicarán en las calles Ramón y Cajal, Padre Isla, Independencia y dos en el Jardín de San Francisco. Además, se desplegarán otros 25 aforadores de tráfico móviles que cambiarán de ubicación por toda la ciudad durante un período de tres semanas. En total, se medirán 80 ubicaciones en lugares como Sáenz de Miera, Papalaguinda, Cardenal Jacinto, Santos Olivera, Fray Luis de León, Señor de Bembibre, José Aguado, Murillo, Alvalde Miguel Castaño, Las Huergas, Peña Labra, Peña Pinta, San Antonio y Espigüete.