Piden perdón a Dios
Realizar actos ilegales puede acarrear que la persona vaya a la cárcel por no cumplir con las normas básicas de convivencia o poner en riesgo al resto, por lo que, existen estos lugares para encerrarlos y que no suponga un peligro para la sociedad. No obstante, al tener tanto tiempo libre y no poder salir del lugar, muchos aprovechan para aprender cosas nuevas, ya sea retomar los estudios o aficionarse a un nuevo hobby.
Por otro lado, nos encontramos con aquellos que buscan la salvación y piden perdón a Dios. Por ello, unos presos que entraron en el programa creado por el Servicio de Asistencia Religiosa Evangélica, se centraron en el rezo como manera de aliviar el dolor causado. Bajo la promesa religiosa de ser un buen cristiano, se les ha estado observando durante la programación correspondiente y se ha decidido otorgarles la libertad en Navidad. Asimismo, son reclusos que tienen el tercer grado, por lo que, se considera que sus delitos son de menor nivel y pueden salir de prisión, pero volviendo para dormir.
Dadas las fechas en las que estamos, han pedido poder pasar las noches del 24 y el 31 en sus hogares con sus familiares, petición que se ha cumplido y que pone en juego la buena voluntad que han demostrado.