El Atlético vive un final de partido apoteósico que les deja fuera de la Champions League
El Atlético de Madrid volvió a vivir una ‘noche de brujas’ en víspera de Halloween al caer eliminado de la Champions League de la forma más surrealista posible. Los del ‘Cholo’ Simeone soñaban con llegar ‘vivos’ a la última jornada de la fase de grupos, siendo do Dragão el lugar donde esperaban lograr el pase a los octavos de final. Pero el sueño del Atlético y de los ‘colchoneros’ se truncó por culpa del Bayer Leverkusen, que estando prácticamente eliminado de la Champions luchó para apurar sus opciones de estar, al menos, en la siguiente ronda de la Europa League.
Un partido que vuelve a demostrar la mala suerte del Atlético de Madrid en la Champions League, yendo a remolque durante los noventa minutos y fallando ocasiones claras de gol que hubieran supuesto un posible pase a los octavos de final. Los errores de Antoine Griezmann y de Ángel Correa en la salida de balón fueron claves para el devenir del encuentro, teniendo en cuenta que ambos jugadores perdieron el esférico cerca del área y el Bayer Leverkusen no perdonó delante de Jan Oblak.
Un penalti errado por Carrasco en el último segundo volvió a demostrar la mala suerte de los colchoneros con las penas máximas
La fe del Cholo, del Atlético y de la grada llevó al equipo ‘en volandas’ logrando poner rápidamente las tablas en el marcador gracias a los tantos de Yannick Carrasco y de Rodrigo de Paul. Pero no fue suficiente para que el Atlético doblegara a los de Xabi Alonso, que aguantaron el resultado como auténticos ‘jabatos’.
Pero el caos llegó en el último instante del encuentro y es que, en una ‘embarullada’ acción donde Jan Oblak subió a rematar el último saque de esquina, el colegiado pitó penalti justo después de señalar el final del partido. Una situación tan atípica como surrealista pero que dejaba al Atlético con vida y dependiendo de un penalti en el minuto 98.
Yannick Carrasco fue el encargado de tirarlo, a sabiendas que de fallarlo se convertiría en villano al dejar eliminado a su equipo. Y una vez más, el Atlético volvió a errar un vital lanzamiento desde los 11 metros, pero no solo eso, si no que Saúl envió el rechace a la madera y Reinildo, que remató en boca de gol, vio como su compañero Carrasco desviaba el esférico al estar debajo de la portería. Sin duda uno de los finales más raros y surrealistas que se han vivido en los últimos años y que deja al Atlético fuera de la Champions y con dudas de si podrá clasificarse para la Europa League.