El número de personas que trata de llevar a cabo el suicidio en León ha aumentado de forma preocupante y ya son más de 370 personas las que han intentado quitarse la vida en la provincia, solo en lo que va de año.
Se trata de situaciones muy difíciles de evitar, ya que, casi la totalidad carecen de aviso previo y una gran parte ni siquiera han buscado ayuda en especialistas antes de tomar la decisión.
En lo que va de año, de enero a agosto, el servicio de Emergencias ha registrado 379 intentos de suicidio en León, lo que supone un tremendo aumento de más del 45% desde 2020, cuando tuvo lugar el confinamiento debido a la pandemia.
Estos preocupantes sucesos se llevan a cabo de muchas formas distintas desde autolesiones con objetos o arma blanca, hasta ingesta de medicamentos, lanzamiento al vacío desde pisos o montañas o ahorcamientos.
Cada año, entorno a cincuenta personas consiguen llevar a cabo el suicidio en León, un dato que no deja de aumentar en los últimos años y que ya supera con creces a otras causas.
Tanto es así que, en menores de 40 años el suicidio es la principal causa de muerte violenta y en Castilla y León ya duplica las muertes por accidentes de tráfico y quintuplica las muertes por violencia de género, ocupando casi el 1% de las muertes total en la Comunidad.
Un problema que lejos de disminuir, no deja de aumentar y que ya representa unas cifras totalmente alarmantes para lo poco que se habla de ello y el tabú que supone para la sociedad que, según muchos expertos, debería de dejar de mirar para otro lado y atajar la prevención y el tratamiento de estos casos lo antes posible.